¿Conoces el arte del Renacimiento?, ¿sabes cuales son los trucos para diferenciarlo del arte medieval?, ¿qué avances surgieron en la época para que se diera un paso tan abismal en el arte del Renacimiento?
La aparición de un nuevo mundo, uno ya conocido, el Renacimiento
Renacimiento o renacer. El renacimiento del arte clásico se divide en 2 etapas, llamadas Quattrocento, siglo XVI y Cinquecento, siglo XVII, para situarnos.
Todos los períodos de tiempo en la Historia han tenido tanto una época de crecimiento, como una de decadencia (1). El Renacimiento es la oposición a la Edad Media, todo se centra en el hombre, en vez de en Dios. Para entendernos, un nuevo comienzo, un cambio radical con la manera de vivir de los últimos 10 siglos.
De Grecia se imitó el espíritu, el neoplatonismo(2), y de Roma las formas artísticas. Una nueva mirada para el clasicismo. En el arte, la belleza formal sustituye al expresivismo de la Edad Media. Digamos que lo feo se vuelve bonito y bien hecho.
Vuelve el canon(3) griego para las esculturas, y las imágenes se centran más en ser bellas que en exagerar gestos o formas para transmitir el mensaje. Ahora, además del cristianismo, la mitología clásica cobrará un papel fundamental en la temática del arte.
La hora de los nuevos ricos
Es la época en la que los poderosos(4) son los encargados de proteger y difundir el arte. Los Florentino Pérez y Amancio Ortega de la época, los que manejaban billetes. Por suerte o por desgracia, el arte siempre es elitista.
Aparecen los gremios, que eran como asociaciones con leyes. Se dedicaban al estudio y a la práctica de un oficio. Generalmente se ubicaban en un taller. Dentro del gremio se diferenciaban entre maestro, oficial y aprendiz, con gran cantidad de colaboradores y aprendices, donde el aprendiz escoge al maestro. Lo que era un Consejo Jedi (Star Wars), pero del arte.
Aquí, llegaban los mecenas, que eran como los “managers” de los artistas, encargados de su sueldo y de vender sus obras. Además, gracias a los avances científicos, podían estudiar anatomía, geometría, alquímia o física, como avances más destacados.
El inicio de una época apoteósica
La primera revolución artística surgió en Florencia con los Médicis(5) al poder. Basada en la escultura, los artistas empezaron a hacer esculturas de dioses en pelotas y todos como modelos. Pero, ¿sólo los cánones clásicos o la temática mitológica causaron esa revolución? No, por ejemplo, en la escultura se introduce el mármol o el bronce como materiales principales, además de la terracota o barro cocido y la madera.
Grandes nombres empezaron a surgir como el de Lorenzo Ghiberti, Brunelleschi o el famoso Donatello. El revolucionario fue Donatello, por su arte y también por su orgullo y su coraje. Un día llegó un cliente a su taller para comprarle una cabeza esculpida, pero el se negó porque estaba muy cara. A Donatello se le fué la pinza y la destrozó a martillazos. ¡Vaya genio!, como para despertarlo por la mañana temprano. Considerado el mejor escultor europeo del siglo XV, ayudante de Ghiberti(6).
La elegancia de las figuras góticas se pierde por la expresividad de éstas, aparece el desnudo, el retrato realista o la manera en que representaba siempre a sus figuras, de pie. Podemos decir que el David de bronce de Donatello, fue la primera escultura clásica del Renacimiento, en pelotas y posando.
Pero el rasgo innovador e histórico más importante con diferencia se dio en la pintura, la perspectiva.
La perspectiva, la revolución silenciosa del arte
El primer gran truco para diferenciar al Renacimiento de la Edad Media. Gracias a los estudios de geometríca y matématicas, poco a poco los pintores fueron descubriendo una nueva manera de realizar sus obras. Como si se tratara de un formato en “3D” para la época, las pinturas por primera vez en la Historia, comenzaron a representar la profundidad. Hasta el final del Gótico(7), todas las pinturas eran realizadas en “2D”, las imágenes se amontonaban unas sobras otras para producir la sensación de profundidad, pero eso se acabó.
¿Cómo sabemos que las pinturas tenían perspectiva? Muy fácil, los artistas, se fijaban en un punto de la obra, denominado “punto de fuga”. Es decir, en la obra surgía a partir de ese punto, las imágenes o formas más cercanas a este punto eran de mayor tamaño o dimensiones, y cuanto más se alejaba de este punto, las formas iban perdiendo volumen poco a poco. La perspectiva fue un gran paso para los paisajes, especialmente para los que aparecían de fondo ya que, anteriormente, todo daba una sensación muy lineal y te perdías todo lo que pasaba por detrás, ¡con lo que nos gusta cotillear! Ahora la profundidad será la base de toda obra, y aunque parezca un dato insignificante y obvio para nuestros días, fue un gran paso para la humanidad en el campo de la pintura, ya que sin él, no habríamos podido crear obras de arte tan bellas y tan perfectas.
Artistas de ayer, leyendas de hoy
A lo largo del Renacimiento surgen numerosos maestros, tan famosos e imprescindibles hoy día, como Boticelli, Miguel Ángel, Rafael, Tiziano, Tintoretto… pero sin duda, el que más destacó fue Leonardo da Vinci.
No solo destacó en las artes, sino especialmente en temas de anatomía, tecnología o geometría. Era un auténtico maestro de todo, un inventor, un creador. Gracias a sus estudios anatómicos, pudo reflejar en sus obras prácticamente a la perfección cada detalle del ser humano. Leonardo conseguía a muertos de hospitales que nadie reclamaba y hacía las primeras autoxias, ¡casi 400 años antes!
Sin distancia que se escape
Pero otro rasgo en el que haría avanzar a la pintura llegaría en Milán, cuando realizó las dos versiones de la Virgen de las Rocas. Será el otro de los grandes trucos, el sfumato, no penséis mal.
Era una nueva técnica basada en la superposición de varias capas de pinturas muy finas, dando un efecto vaporoso e impreciso, además de proporcionar una sensación de lejanía.
A raíz de estos avances y estudios, el arte en el Renacimiento fue evolucionando poco a poco, hasta llegar a la época Barroca, donde alcanza su máximo esplendor.
El Renacimiento nos ha legado cientos de obras de arte, desde La Gioconda de Leonardo, La escuela de Atenas de Rafael, las pinturas de la capilla Sixtina o el Moisés de Miguel Ángel.
Posteriormente, una vez decayera el arte clásico al final del Barroco, el Neoclasicismo(9) volvió a recuperarlo siglos más tarde, gracias al descubrimiento de Pompeya y Herculano(10). Esto provocó de nuevo la recuperación de todos los patrones clásicos, pero adaptados al siglo XVIII y XIX.