Alemania nazi. La «obsesión» de Japón convertida en anime.

Una escultura de Hitler, el nazi más conocido, en un museo de cera de Indonesia (1), “altera” al mundo occidental. Tras múltiples críticas por parte de organizaciones de defensa de los derechos humanos, el gerente del museo se vio obligado a retirarla (2). Pero no solo pasa en Indonesia, también en Japón .

La fijación de Japón

El nazismo y el fascismo siguen muy presentes, ya no sólo en Occidente, sino también en Oriente. Y ¿qué tenemos en Oriente? Pues una forma diferente de ver estos temas (3) y a un antiguo aliado de la Alemania nazi, Japón. Pero ¿qué pasa con Japón? Pues que no le tiembla la mano a la hora de abordar este tema en una de las expresiones más características de su cultura pop: el anime.

No deja de sorprender que un aliado nazi derrotado en la Segunda Guerra Mundial, no tenga ningún problema a la hora de tratar el tema. Es más, se puede decir que tiene especial fijación por dicho período. Esto contrasta con Occidente dónde, a día de hoy, es impensable abordar dicho tema como en Japón. ¿Por qué? Probablemente haya múltiples respuestas para esta pregunta. Lo que sí está claro es que existen innumerables ejemplos, dentro de la cultura pop japonesa, que hacen referencia a este episodio. Por ejemplo, el citado anime que vamos a ver a continuación.

Kinnikuman y el nazi bueno

El primer anime a destacar sería Kinnikuman (4). Relata las aventuras de un superhéroe bastante atípico (5) que salva la Tierra de monstruos malvados. Original, ¿eh? La serie tiene especial relevancia porque encontramos a un personaje muy controvertido, Brocken Jr. (6) ¿Por qué la controversia? Su  apariencia es prácticamente igual a la de un soldado nazi. Además, no contento con ello, resulta que no es un “nazi malo”, sino todo lo contrario… ¡Es un superhéroe que lucha contra el mal! Pero va más allá. Si no eran suficientes las papeletas que tenía para su censura, se suma una más: Brocken Jr. le concede el perdón al asesino de su padre. Como imaginaréis, fue censurado en todos los países en  que se emitió la serie (7). Incluso en el videojuego de luchas de Nintendo, fue cambiado por otro personaje (8).

El monstruo y los niños que salvarán al Tercer Reich

El segundo anime a comentar sería Monster (9). Es una historia que mezcla el terror con la novela policíaca y detectivesca, en un contexto histórico tan real como la vida misma. Me refiero a la unificación de Alemania y la caída del muro. Se muestra la crudeza de la policía en los países comunistas, así como el ascenso de la ultraderecha en los años 90 (10). No en vano, uno de los personajes principales es un niño que, como otros muchos, se ha visto sometido a una serie de experimentos con el fin de lograr una “superélite” al servicio del supremacismo. ¿A qué nos recuerda esto? Al Tercer Reich y a la institución (11), que  acogió y secuestró muchos niños para su adoctrinamiento, con el fin de asegurar el Reich (12).

Alquimia y nazismo a partes iguales

El tercer anime a comentar sería Fullmetal Alchemist Brotherhoood (13). Se nos narra la historia de dos hermanos en busca de la Piedra Filosofal en un mundo de ficción con toques steampunk (el vapor es la fuerza rey en la tecnología; y los chalecos, para hombres, y los largos vestidos, para mujeres, la moda del momento) y fantásticos (la alquimia es la “ciencia” que domina este mundo). En este anime, las referencias a la Alemania nazi son abundantes. Entre las más destacadas tenemos que el gobernante del país (completamente militarizado) donde viven nuestros dos protagonistas, es un militar con bigotillo que ostenta el título de führer. Además, al igual que su alter ego real, tiene cierta obsesión con la expansión territorial a base de cañonazos. ¡Qué sorpresa!

Otra similitud que se puede establecer entre realidad histórica y el anime es el tema de la cruenta persecución que sufrió el pueblo judío por parte de los nazis. En  el anime se ve con el inventado pueblo de Ishval y sus habitantes los ishvaelitas.  Llega un punto donde la ficción se confunde con la realidad; ese punto es la película de Fullmetal Alchemist, el conquistador de Shambala (14), en la que aparece el propio Hitler. Impresionante, ¿no? Lo que viene a continuación quizás lo supera.

Cuando Drácula lucha contra los nazis

El último anime a comentar, no por ello menos importante, sería Hellsing. En este caso sus OVAs (15) (las pelis en vídeo, no la serie para TV), que tienen un argumento que se aleja bastante de la trama real del manga (16). Pero ¿de qué trata Hellsing? ¡Preparaos!

La historia gira en torno a la organización Hellsing.  Esta es fundada por el mismísimo Abraham Van Helsing (sí, el “cazador de vampiros”) y que tiene por misión proteger a la monarquía inglesa y las fronteras del país. Entre sus integrantes tenemos al último miembro vivo de la familia Helsing. Se trata de un mayordomo que en sus ratos libres extermina vampiros con hilos de plata. Además del propio Drácula (17). ¡Como lo leéis!

Y ¿de quién o de qué tienen que proteger a la monarquía y a su país? Por una parte del Papa de Roma (no voy entrar en este aspecto, por temas de espacio). Por otra parte, la que me interesa, de una organización nazi compuesta por muertos vivientes, hombres lobo y chicos con el don de la ubicuidad y la inmortalidad (18). ¿Cómo os quedáis?

A toda esta ida de olla, que parece salida de una noche de pelis de Halloween, podríamos encontrarle algún sentido si la relacionamos con… ¡Indiana Jones!… Que ¿qué digo? Pues que el interés por el ocultismo y el esoterismo (19) que tenía Hitler, que incluso buscaba el santo Grial, no es sólo ficción.

Sea como sea, los miembros de esta organización nos recuerdan y se identifican en su indumentaria con las diferentes instituciones nazis. Algunos con las SS, otros con las juventudes hitlerianas. Sólo hace falta echarle un vistazo a las tropas de vampiros nazis o a Schrödinger (un personaje con orejas de gato y el don de la ubicuidad).

Goku también lucha contra los nazis

Soy consciente de que se podrían mencionar otros muchos animes. Por ejemplo, y para los más nostálgicos, tenemos Dragon Ball Z. ¡Fusión! (20). Aquí, cierto villano, al cambiar las leyes del cielo, provoca que los muertos vuelvan a la vida; los buenos y los malos… Así, Hitler vuelve del infierno y, en clave de humor, se enfrenta a Goten y Trunks, quienes lo acaban derrotando. 

Como podéis observar en el siguiente vídeo

Anime: la “admiración” de Japón por la Alemania nazi

La clave para entender esta fijación quizás está en que Japón es un país con un marcado nacionalismo. No hay más que recordar a los samuráis, al emperador o el papel japonés en las dos guerras mundiales. En la primera, aprovechó la debilidad de las potencias de Occidente para expandirse. En la segunda, vio en Alemania un aliado perfecto que le permitía consolidar su poder sobre los vecinos y proclamarse gran oriental. ¿Qué querían dejar claro? Básicamente, que el pueblo nipón es superior al resto de países.

Ante esto, es evidente porqué el ejército alemán del Tercer Reichy la Alemania nazi despierta “admiración” en el pueblo nipón. Básicamente responde a una idea muy simple: el nacionalismo, llevado a su extremo, y su personificación en Hitler y la Alemania nazi. Si a ello, para más inri, unimos la estética, la puesta en escena de este régimen (los uniformes eran confeccionados por Hugo Boss; no se yo hasta qué punto las celebridades que prestan su imagen para la marca sabrán de este «pequeño detalle»; habría que preguntarle a Chris Hemsworth –Thor para los amigos-), y por supuesto, la simbología. En este último aspecto hay que destacar que la esvástica es un símbolo budista que aparece en muchos budas. ¿Sorpendidos? Quizás aquí está una de las pistas de porqué en Japón el nazismo se concibe de forma diferente.

Está claro que el nazismo es todo un referente para un Japón con unas raíces ultranacionalistas.  El anime, representando a la cultura popular, no es ajeno a todo esto. Se erige como una manifestación de todo ello, abordando el tema con mayor o menor profundidad.