La niña que se enfrentó a todo un ejército. Manuela Malasaña

¡Estamos de fiesta! Llega una fecha muy llamativa para todos, pero en especial para la comunidad de Madrid. Me refiero al 2 de mayo y el recuerdo del levantamiento del 2 de mayo. En este mismo participó nuestra protagonista de hoy: Manuela Malasaña.

A los héroes populares que el 2 de Mayo de 1808 riñeron en este mismo lugar el primer combate con las tropas de Napoleón.

Así reza una placa en la Casa de Correos en la Puerta de Sol de Madrid (sí, sí, donde el reloj de las uvas de nochevieja).

Placa iglesia Maravillas Madrid
Placa de la iglesia de las Maravillas que honra la memoria de los madrileños que defendieron con su vida a Madrid.  Fuente

Seguramente todo el mundo conoce la historia… El pueblo de Madrid contra las tropas de Napoleón porque no dejaban al ejercito levantar armas… Historias de personas que tuvieron que echarse a la calle porque nadie los defendía mientras los “mosiú”, gabachos… vamos franceses, estaban invadiendo sus calles.

Para la historia, los verdaderos héroes fueron los capitanes Luis Daoíz y Pedro Velarde  (1). Sin embargo, hay muchas personas anónimas que pelearon y murieron por su rey y su libertad.

En este fervor patriótico tuvo mucha importancia la mujer (2). Por primera vez aparecen con nombres y apellidos, mujeres del pueblo, sencillas y humildes. En este artículo me voy a centrar en una de ellas, una de esas femme fatal: Manuela Malasaña.

Las cosas en Madrid estaban tensas

Pongámonos en situación. En 1808, el 2 de mayo, el pueblo de Madrid representado Fernando VII(3) se levantó contra el invasor napoleónico. Claro que los franceses habían suplantado antes a la monarquía española. O eso se quería hacer pensar, porque esa no fue la realidad. Lo cierto es que este señor, Fernando, era un poco chaquetero… Y que realmente quien se levantó contra los «mosiús» fue el pueblo. ¿Por qué no acudió el ejército? Un pueblo no se lía a machetazos a la primera de cambio ¿no?

Ese día, el pueblo se estaba preparando para la fiestas. Además, la cosa estaba tensa por la convivencia con los franceses desde hacía un mes y pico (4). La monarquía estaba en crisis y en palacio solo permanecían la reina de Etruria-la infanta Mª Luisa , y el infante don Francisco de Paula. Encima había muchos rumores sobre los planes que tenía Napoleón para los infantes. ¡No quería dejar títere con cabeza!

Madrid se rebela

Como en todas partes, aquí también había agitadores. En este caso, estaban cerca del Palacio Real cuando vieron que la reina de Etruria salía en una carroza. Detrás de ella había preparada otra para el único infante que quedaba en Madrid. Los agitadores pensaron que Napoleón se quería llevar a Francia al infante, así que al grito de ¡que nos los llevan! comenzaron una revuelta. El furor y la rabia se desbordaron…

2 de mayo
Levantamiento del 2 de Mayo frente al Palacio Real. Fuente

El pueblo se siente traicionado. Comienza el boca a boca y la noticia se extiende como la pólvora. Los madrileños no se fían de los franceses y hay que defenderse de cualquier manera. Empiezan arrojando macetas desde los balcones, con la agujas de coser las mujeres… cualquier cosa que se tenga a mano sirve de defensa. Los sublevados se concentran en la Puerta del Sol. Pero, aún luchando con uñas y dientes,  no consiguen aplacar a las tropas francesas. Por su parte estos comienzan a entrar en masa en Madrid  y a dirigirse hacia ese punto.

El ejército español tenía ordenes expresas de no actuar. Los únicos valientes que se liaron la manta a la cabeza para ayudar al pueblo fueron los capitanes Daoiz y Velarde. Sobretodo Velarde que era un poco culo inquieto. Así, el único cuartel que le echó narices contra las tropas francesas(5) fue el cuartel de artillería de Monteleón.

Total, que al final, después de tanta lucha por parte del pueblo, del cura al zapatero, muere hasta el apuntador. Esto sería  el pistoletazo de salida de la Guerra de la Independencia.

Mujeres… ¡A las armas!

Aunque me voy a centrar en Manuela Malasaña, en esta refriega además de otros héroes citados, encontramos a mujeres que lucharon como verdaderas heroínas. Encontramos buena muestra de ello si paseamos por las calles de Madrid.

Manuela Malasaña rente a los franceses
Manuela Malasaña haciendo frente a las tropas francesas. Fuente

Puede sonar contradictorio, pero el verdadero nombre de esta heroína del pueblo fue Manuela Malesange Oñoro. Era hija de un panadero de origen francés con apellido españolizado. Más conocida como “Manolita”, en esos momentos tenía 16 años, vivía cerca del parque de Monteleón  y trabajaba como costurera en un taller de modistas.

Hay dos versiones contrapuestas sobre «Manolita la costurera». La primera versión dice que murió el 2 de mayo por  un balazo en el Parque de Artillería de Monteleón, llevando cartuchos a su padre, que se había unido a la resistencia. Este, ni corto ni perezoso -si total ya estaba muerta- no dejó de disparar en ningún momento.

Placa a Manuela Malasaña
Placa homenaje a Manuela Malasaña en el barrio madrileño de Maravillas. Fuente

Esa versión sería desmentida por las investigaciones posteriores. Surgiría otra que sostiene que la costurera en realidad era huérfana y que moriría el 3 de mayo.

Manolita, según esta versión, iría a su casa, seguramente para esconderse de los altercados, cuando al encontrarle unas tijeras (arma letal al parecer) los soldados franceses la asesinan en la misma calle. El cuñadísimo de Napoléon había creado una orden por la cual mandaba fusilar a cuantos llevaran armas sin permiso.

Así, Manolita se convertirá en toda una femme fatal de la época  y en un futuro se haría eco hasta en la prensa con las supuestas versiones (6).

Manolita Malasaña para el recuerdo

Aquella niña no ha querido ser olvidada y ya sea como defensora de Monteleón o como víctima inocente de Murat,  simbolizará el valor y el coraje del pueblo madrileño. De ahí la exitosa difusión del mito de Malasaña. Tan famosa se hizo que da nombre a un barrio de la capital, una de las zonas más cool y con mayor personalidad de Madrid.

¡¡¡Ahh!! Y como estamos a las puertas del 2 de mayo, para los interesados en conocer donde acontecieron estos hechos ahí un plano de la ruta del 2 de mayo por la capital:

ruta del 2 de mayo
Ruta del 2 de mayo por la capital madrileña. Fuente

Referencias y bibliografía

Referencias

(1) Daoíz estaba al mando del Parque de Artillería de Monteleón. Velarde, entre tanto, era un alto cargo del Estado Mayor del Cuerpo de Artillería. A pesar de las órdenes expresas de no entrar en combate contra los franceses, los dos artilleros se pusieron del lado del pueblo español. El pueblo se defendía de los soldados franceses con piedras, palos, navajas y cualquier cosa que estuviese a su alcance.

(2) Lo que no es tan conocido es que ese levantamiento fue ejecutado principalmente por mujeres. No se limitaron a una función pasiva, o a lanzar proclamas. Lucharon cuerpo a cuerpo contra los franceses con la ayuda de navajas, adoquines e incluso tiestos. Varios testimonios directos de la contienda, ni más ni menos que Galdós y Mesonero Romanos lo corroboran.

(3) Fernando VII: rey de España (El Escorial, 1784 – Madrid, 1833). Era hijo de Carlos IV, con quien mantuvo muy malas relaciones. Ya como príncipe de Asturias conspiró contra su padre, agrupando a su alrededor un partido «fernandista» con cierto apoyo cortesano y popular, formado por todos los descontentos con la política del valido Godoy. Descubierta la conspiración, el príncipe fue condenado por el proceso de El Escorial (1807). Enseguida pidió y obtuvo el perdón de su padre. Ello no le impidió encabezar el motín de Aranjuez. Con este arrebató el trono a Carlos IV y derribó a Godoy del poder (1808).

(4) Para comprender mejor estos acontecimientos del 2 de mayo y los fusilamientos del día siguiente, será mejor remontarnos unos meses. El 27 de octubre de 1807, con la firma del Tratado de Fontainebleau España permitía el paso por tierra a las tropas napoleónicas. Estas pretendían conquistar Portugal, fiel aliado de Inglaterra. Pronto quedo claro cuáles eran las verdaderas intenciones de las tropas francesas: la anexión de la corona española al Imperio napoleónico.

Tras el motín de Aranjuez, que tuvo lugar entre los días 17 y 19 de marzo, y la salida apresurada de Madrid de casi todos los miembros de la familia real, la presencia francesa se hizo aún más palpable en España. Carlos IV fue obligado a abdicar en favor de su hijo el príncipe Fernando. El pueblo no admitía de buen grado presencia francesa. Por ello la tensión, principalmente en Madrid, iba en aumento. Para colmar la amarga copa que Napoleón pretendía hacer beber al pueblo español, obligó tanto a Carlos IV como al ya rey Fernando VII, a firmar las Abdicaciones de Bayona. Según estas ambos renunciaban al trono de España en favor de José Bonaparte, hermano de Napoleón, que a partir de ese momento reinaría en España como José I.

(5) Estaban comandadas por Joaquín Napoleón o Joachim Napoléon Murat (Labastide-Fortunière, 25 de marzo de 1767 – Pizzo, 13 de octubre de 1815). Fue un noble y militar francés al servicio de su cuñado Napoleón, y gran duque de Berg.

(6)   Ilustración Ibérica, 27 de abril de 1889 – Versión de la muerte de Manuela Malasaña.

 (…) en esta epopeya hay una musa trágica: la incomparable Manuela Malasaña, muerta en el momento de entregarle los cartuchos, para que hiciese fuego, a su padre. El pueblo, y sólo el pueblo, figura en este día como salvador de la independencia patria.(…)

http://hemerotecadigital.bne.es/issue.vm?id=0001356465&search=&lang=es

La Ilustración artística, 27 de abril de 1896 – Otra versión de la muerte de Manuela Malasaña.

(…) Manuela Malasaña no defendió el Parque, ni cayó herida de muerte en el acto de pasar a su padre los cartuchos – entre otras razones porque su padre había muerto antes del 2 de mayo. – Manuela Malasaña se ganaba la vida bordando, y al regresar del taller a su casa, en aquella luctuosa noche, detúvola una patrulla francesa; la registró, y como la encontrase, pendientes de la cintura las inofensivas tijeras, instrumento de su profesión, sin más examen la fusilaron en las inmediaciones del Parque al punto mismo. En el lugar del suplicio pusieron los españoles una cruz.

La figura de Manuela Malasaña (…) nada pierde con la investigación histórica: es la víctima inocente sacrificada por la brutalidad del ejército invasor; es la mártir que, resignada y sin lucha, derramó su sangre por la independencia de la patria.»(…)

http://hemerotecadigital.bne.es/issue.vm?id=0001527932&search=&lang=es


Bibliografía

  • La Parra López, E., s. f., «Reyes, reinas y regentes: Fernando VII. Biografía», Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes. [EnLinea] Disponible en: http://www.cervantesvirtual.com/portales/reyes_y_reinas_espana_contemporanea/fernando_vii_biografia/ (20/4/2017)
  • Pérez Galdós, B., 1875, El 19 de Marzo y el 2 de mayo, Imp. de Noguera a cargo de M. Martínez, Madrid.
  • Pérez-Reverte,A., 2007,Un día de cólera, Alfaguara.
  • Peyrou, F., 2009, «Manuela Malasaña. De joven costurera a mito madrileño”, en Castells, I., Espigado, G. y Romeo, M. C. (coord.), Heroínas y patriotas: mujeres de 1808, pp. 155-174, Cátedra, Madrid.
  • Real Academia de la Historia, s.f., «Manuela Malasaña», rah.es [EnLinea]  Disponible en: http://www.rah.es/manuela-malasana/ (20/04/2017).
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Guadalupe Frutos Vilaplana
Licenciada en Humanidades por la Universidad de Extremadura. Investigando y descubriendo el mundo las humanidades digitales.