Imagínense un combate de boxeo entre un caballo polaco y un Panzer III, ¿Quien vencerá, el impresionante caballo o el acorazado y monstruoso Panzer III? Antes de proseguir, hagan sus apuestas.
Durante algún tiempo se ha hablado de una famosa carga de caballería ocurrida en Polonia pocos días después del 1 de septiembre de 1939, (día oficial del comienzo de la Segunda Guerra Mundial) cuando el ejército alemán o Wehrmacht invade Polonia por orden de Hitler.
¿Por qué Polonia? Porque Hitler quería vengar las condiciones impuestas en el Tratado de Versalles de 1919, consecuencia a su vez del fin de la Primera Guerra Mundial, (1914-1918). Debido a que este tema de diplomacia no es el que nos ocupa (además es mortal de necesidad) solo daremos una visión general. A grandes rasgos se puede decir que este “gran” tratado supuso para Alemania (entonces Imperio Alemán) entre otras cosas la pérdida de territorios, un ejército y armada limitados, obligación de pagar grandes indemnizaciones de guerra y ceder territorios alemanes al control de los países vencedores (como Francia); lo que los habitantes de Alemania y Hitler consideraron una humillación, que se demostró en las décadas de 1920 y 1930.
Uno de esos territorios arrebatados, era la ciudad de Danzig(1) que formaba un corredor que unía Polonia con el mar Báltico (la idea era dar a Polonia salida al mar obviamente) a la vez que dividía el territorio alemán en dos. Esta fue la excusa de Hitler para exigir a Polonia su entrega inmediata a Alemania en torno al 26 de Marzo (digo excusa porque la ambición de Hitler de territorios no parecía terminar, si no hubiese sido Danzig (actual Gdansk) el pretexto hubiese sido otro; se mascaba la tragedia de una nueva guerra desde hacía meses. Polonia se puso entonces en contacto con británicos y franceses, que le aseguraron su apoyo en caso de invasión. Hitler mientras se aliaba con Mussolini en el “Pacto de Acero”, a la par que acordaba una doble invasión de Polonia en el pacto de “no agresión” con la URSS en agosto, (y no es una broma, dos ideologías irreconciliables de la mano) cubriendo así un posible contraataque soviético. Así se llegó al 1 de septiembre.
Una vez que hemos entrado en contexto, hablemos del asunto que nos ocupa: la famosa carga frontal de caballería polaca contra los panzer alemanes supuestamente ocurrida en los primeros días de la invasión. Este es uno de los episodios más llamativos de la Segunda Guerra Mundial. ¿Es que acaso los polacos pensaban realmente que su caballería podría aplastar a los temibles panzer? Así como suena parece más propio de una serie de televisión dónde finalmente los buenos ganan apelando a la épica, o sacado de algún videojuego; sin embargo, este episodio termina según la historia en un desastre con graves bajas. Pero dejando de lado la tradición, acerquémonos un poco más a los hechos.
Así pues, el comienzo de la guerra implica el comienzo de las operaciones en suelo polaco, el Grupo alemán de Ejércitos Norte dirigido por el general Fedor von Bock, cuya misión era atravesar a toda velocidad el corredor hasta Danzig y capturarla para enlazar con Prusia Oriental (2), (el territorio separado del resto de Alemania situado en el este) siguiendo posteriormente hacia el sur. Mientras la Luftwaffe se ocupaba de que la flota báltica polaca no molestase la ofensiva terrestre, las tropas de von Bock llegaron a Danzig que sucumbió poco después. Sin embargo, las tropas polacas destinadas en ese sector (Ejército Pomorze) se resistieron lo que pudieron; una de sus brigadas de caballería libró algunos combates con la 20º División Motorizada germana en la retaguardia del 4º Ejército (del grupo norte alemán), cerca del río Brda (afluente del Vístula) (3).
Al mismo tiempo una brigada de lanceros consiguió infiltrarse en las líneas de la 3º División Panzer apareciendo de la nada ante una unidad de infantería totalmente desprevenida, que sufrió importantes bajas. Tras pedir estos ayuda, aparecieron unos blindados con ametralladoras que acabaron con varios jinetes y su comandante, logrando que la brigada polaca se retirase dejando vía libre a los alemanes para cruzar el río.
¿De dónde sale pues la idea romántica de la carga frontal de la caballería frente a los panzer? De la propaganda ítalo-alemana (4), puesto que al día siguiente se llevó a unos corresponsales de guerra italianos a la zona, donde se les contó que la caballería “había cargado contra los carros de combate” (5) (la palabra tanque es técnicamente incorrecta).
Pero no fue la última acción de la caballería, el mismo día de la invasión en el pueblo de Mokra (situado en el sur del país a 60 km de la frontera entre Polonia y Alemania). La 4º División Panzer(6) llegó del norte en su carrera hacia Varsovia, allí se encontró con la Brigada de Caballería Wolynska. Bien atrincherada en el pueblo con piezas anticarro de 37 mm, gracias a su buena preparación y el apoyo del tren blindado Smialy, consiguieron rechazar varias embestidas de los panzer, además de ataques en retaguardia de la Luftwaffe . Sin embargo, las graves bajas de la caballería polaca, debido a la superioridad militar alemana, la obligaron a retirarse siendo perseguida por la 4º División Panzer.
Al día siguiente se reanudaron los ataques de la 4º División Panzer contra la Brigada Wolynska, pero la situación era distinta; más al sur, en torno a la frontera, otra división alemana logró abrir un hueco empujando a la 7º Polaca destinada allí para contener al enemigo como parte del Ejército Krakow.
¿Cuál es la conclusión que podemos sacar de todo este lío de nombres, divisiones y zonas en disputa? Que no es cierto que la caballería polaca realizase una carga frontal contra los panzer, pero en honor a la verdad, si es cierto que brigadas de caballería se enfrentaron a divisiones panzer alemanas, como sucedió en Mokra.
¿Sabías que unos locos polacos salvaron a Inglaterra de las garras del III Reich?
Muy interesante, gracias por los datos